domingo, 10 de febrero de 2008

claro/oscuro


Todo venía en orden, en un orden extraño, pero en un orden al fin, ahí iba, no pensaba que hubiera forma de cambiar,pero en realidad era cómodo, porque no veía nada. Todo era completamente negro, ya una vez que me acostumbré, fue muy leve la necesidad de los colores, y entonces apareció el claro/oscuro. Nunca supe que fue, y tampoco entiendo lo que pasa, ahora lo relojes no solo no marchan para atrás, sino que los puedo ver, puedo verme y puedo ver que mi alma brilla cada vez mas claro. Veo el tiempo que corre a la velocidad de mi felicidad, veo la verde esperanza, mientras camino. Voy dejando un rastro de satisfaccion que queda brillando como gotas escarchadas de rocío, abro el cielo y de ahí salen murmullos celestes que me miran con gran sorpresa, no puedo dejar de ver la cara del silencio que se incomoda al verme ahora tan lejos. De pronto me asusto, y veo como silba el futuro, que en esta carrera siempre va tratando de sacarme más ventaja, sigo cómodo porque también lo veo, lo veo en mí, me veo y lo más importante, te veo a ti.
No se como vino, ni tampoco tú, igual, mucho mucho, también también...

sábado, 9 de febrero de 2008

si sabes quien eres, carga con eso

el día que sea libre, podré salir a gritar, pero mas allá de eso no habrá nada, quizas pueda celebrar mi vida tirandome de un sexto piso¿qué pasa? no lo sé, ahora cae saberlo, por qué preguntarse donde ir¿no debería saberlo? ya me lo has dicho, nunca hay un solo camino, pero¿y si hago otro nuevo?¿debería? ya no importa, el pasado pasó, esta ahora abierto el cielo, tomo lo que quiero y lo que no, lo boto, eso me pasa con los sueños, pero no me gusta, esos no deberían irse. Aqui te dejo la vida, en el mejor de los casos le doy cuerda para que siga caminando.

lunes, 4 de febrero de 2008

cambias rociando invisibles sueños....



En esos momentos en que todo es de colores, que aunque haya salido el sol, las estrellas igual sonríen, en que el viento te peina sin que se lo pidas, todo da vuelta para que tú lo veas, para que tú lo sientas, esta ahí y no le ha sido fácil venir. ¿Ya te diste cuenta? sí, sigues sonriendo, es como un murmullo al oído, yo también me río ¿cómo no me di cuenta antes? tal vez porque si no, no hubiera sido tan perfecto. Aquí me tienes, tan a tu favor tan en tus brazos, yo no me quejo, para nada, en cambio sonrío y disfruto.